lunes, 15 de abril de 2013

Nuestros hijos y la tecnología.

Mis hijos tienen, en términos generales, acceso ilimitado a la tecnolgía: televisión, computadores, ipad, internet.

Sé que esta sola frase ya puede ponerle a más de uno los pelos de punta, pero en una familia como la nuestra las cosas no podrían ser de otra manera.
 Foto tomada de facebook

Martín y yo somos ingenieros electrónicos. Él ha sido desde siempre un fan de los equipos Mac, incluso durante la época en que estos "cayeron en desgracia". Yo en uno de mis primeros semestres de universidad hice una investigación sobre algo muy poco conocido en esa época: Internet. Eso me dio la posibilidad de tener acceso a la red desde un poco antes que la mayoría de mis compañeros de semestre. También fui una de las primeras de mi grupo en tener computador propio.

Desde que nos casamos siempre ha habido al menos un computador en nuestra casa. Todos mis hijos han estado sentados frente al computador conmigo desde que fueron bebés. Nos han visto escribir, trabajar, jugar, diseñar páginas web, investigar, aprender, comunicarnos por medio de estos aparatos que innegablemente forman parte de nuestra cotidianidad.

Ustedes podrían decirme que los niños se vuelven sedentarios si no se despegan de las pantallas, pero mis hijos a pesar de pasar largos ratos frente a ellas, también tienen tiempo para salir, mover su cuerpo al aire libre, crear, hacer deporte, etc.  Además poco hemos vivido en un apartamento en medio de la ciudad, sino que nuestras casas han sido campestres, así que en contraste a tanta tecnología, nuestros niños han crecido viendo vacas, caballos y gallinas, cultivando y meciendose en hamaca. Tal vez, sin haberlo planeado mucho, les hemos proveído de un ambiente balanceado que equilibra tanta tecnología.

Para los miembros de esta familia los computadores son herramientas de trabajo, aprendizaje y esparcimiento. Nos abren las puertas al mundo de información, nos conectan con el resto del planeta y nos entretienen. Aunque hemos tenido épocas en que, por calmar mis propias dudas, se ha intentado un esquema de uso restringido por tiempo, siempre volvemos a la libertad pues es lo que se siente más natural y menos forzado para nosotros.

Sé que este es uno de esos temas que en las familias genera opiniones encontradas, y respeto a quienes piensan diferente, pero no estoy de acuerdo con prohibir y satanizar algo que hace parte de la vida actual y que bien manejado es maravillosamente útil y versátil. Entiendo que es necesario el contacto con la naturaleza, con las personas, con el mundo que nos rodea, pero también es necesario saber manejar las herramientas de las que disponemos pues son también instrumentos de trabajo y estas habilidades son cada vez más necesarias para integrarse al mundo.

Tampoco tenemos ningún tipo de filtro de contenido en nuestros equipos. Como los computadores están casí en mi habitación yo puedo saber qué están haciendo, qué tipo de juegos les gustan, cuáles páginas visitan y estoy ahí presente para orientar y ayudar. Los dos mayores tienen ahora más privacidad con el ipad y el ipod, que los pueden usar en sus cuartos o en cualquier otro lugar, pero confío en que les hemos enseñado a manejarse con prudencia y sabiduría, que conocen las mínimas normas de seguridad para el uso de internet y esperamos que nos tengan la confianza suficiente para comunicarnos cualquier irregularidad o situación desagradable o que no sepan como manejar y pedir nuestra orientación.

En este momento tenemos dos computadores de escritorio, un portatil (es de Martin, pero los niños lo usan cuando él está en casa), cuatro ipads y Mariale tiene un ipod touch. La solución a las pelas por los equipos ha sido tener más equipos disponibles y la única regla para el uso del computador es que si lo quieres y alguien lo está usando, pídele que te lo deje dentro de media hora, así tendrá tiempo para terminar lo que esté haciendo.

Respondiendo a algunas de las preguntas que hacía el entrevistador en este artículo:
- No le veo problema a que los niños pequeños tengan contacto con los computadores. En el mundo en que vivimos hace parte del proceso natural de crecimiento, exploración e interacción con su entorno.
- Las medidas de seguridad que se deben adoptar van cambiando según la edad. Al principio la más efectiva y la única necesaria es un padre o madre presente y atento. Orientar en el uso de las páginas y en la elección de los juegos y contenidos; orientar, no limitar ni prohibir. Conversar al respecto!. A los más grandes enseñarles lo que es un correo spam, que no deben creer todo lo que leen, que no deben aceptar solicitudes de amistad o de contacto de personas que no conocen en las redes sociales, que no se trata de una competencia por quién tiene más contactos. Que los amigos o familiares de tus amigos, si no los conoces en persona no son tus amigos; esto aplica tanto si son niños como adultos. Que no pueden compartir con alguien a quien no conocen su información personal, su teléfono, dirección, fotos.
- Sobre limitar o no el tiempo de pantallas no creo que exista una regla que sirva para todo el mundo. Es un proceso familiar de acuredos y concensos, de prueba y error, de encontrar lo que le funciona a la familia y modificarlo cuando deje de funcionar.
- Creo que los juegos de computador y de ipad son buenas herramientas de las que se aprende mucho, no sólo con los juegos "educativos", sino con cualquier juego. No puedo hablar de las consolas pues no tenemos, pero supongo que en últimas es lo mismo. Todos los juegos tienen reglas que seguir, en muchos tienes que leer para entenderlos, desarrollas habilidades matemáticas y espaciales, aprendes sobre táctica y planeación de estrategias y mucho más.
- Sobre el acceso a las redes sociales, creo que están hechas más para adultos que para niños, no me parece sano darle un iphone con acceso a facebook y twitter a un niño de menos de 12 años, pero si lo utiliza para comunicarse con su abuelitos que viven en otro país, pues vale (aunque para esto puede utilizar otras aplicaciones del iphone sin necesidad de facebook y twitter). Tal vez ahí entraría a restringir un poco, pero estoy teorizando pues no lo he vivido y prefiero hablar desde la experiencia.

4 comentarios:

Laura dijo...

Me ha encantado tu reflexión y explicación. En mi casa, como sabes, tampoco hay límite a la tecnología. Damián tiene Blackberry y ordenador portátil propios, el ipad lo compartimos y además tiene blog y, desde ayer, cuenta de Facebook para comunicarse con sus amigos y familiares que viven lejos.

Abrazos a todos,

Lau

Unknown dijo...

Estoy de acuerdo contigo y me identifico. El entorno actual es tecnológico y limitarlos puede hacer daño. Nuestra familia es similar, por trabajo, en casa hay 3 computadores 1 ipad, es imposible decirles NO cuando ven que esa es la fuente de trabajo. Adicional a que como todo lo ven como juego, pasan un rato interesante divirtiéndose allí y aprendiendo. Yo aún si soy temerosa sobre el tipo de actividad que realizan, tal vez por lo chiquis (4, 6 y 8) y porque el proceso de desescolarización y por ende recuperación de confianza, lleva muy poco; tengo algunos controles parentales, aunque tengo una lista de más de 3 hojas de páginas infinitas con ciertas actividades de aprendizaje, me encanta verles como sencillo aprenden tantas cosas y acuerdo a sus inclinaciones, cada uno ya tiene sus páginas favoritas.

Ana P, gracias por tu artículo, interesante.

Viviana Leal
@lealal100

VIVIANA dijo...

Hola Ana P: Nosotros tenemos una dinámica similar a la tuya. Acá pues somos menos que en tu casa, pero igual no hay acceso restringido para nuestro hijo a la tecnología. El tiene su portátil y su tablet, adicionalmente hay un pc de mesa que es de uso común. David tiene acceso al internet libremente, sin embargo, siempre estoy pendiente de que es lo está mirando y cuando veo que accede a contenidos que no son adecuados, dialogamos sobre el tema, le decimos porque no es conveniente ciertos contenidos. En cuanto a las redes sociales tiene libre acceso y al igual que lo que dices, él ya sabe que correos abrir, cuales no, a quien agregar y es selectivo en ese proceso. El internet no es solamente una herramienta de aprendizaje muy importante, pues también lo es de esparcimiento, ambos jugamos en línea en el mismo juego y eso crea un ambiente de aprendizaje diferente y único, que aunque es virtual tiene un componente diferente que quizás amplia el conocimiento desde otra perspectiva.

Ana P. dijo...

Es curioso, esperaba recibir comentarios con un tono más preocupado, tengo la percepción que son más las familias que limitan que las que dan libertad en este tema. Me alegra coincidir con ustedes =)
Un beso.